Noelia: Hola, Adrián. ¿Cómo estás?
Adrián: Hola, Noelia. Muy bien. ¿Y tú?
Noelia: No tan bien como tú, necesito ayuda.
Adrián: Sabes que siempre puedes contar conmigo. Dime, Noelia, ¿qué puedo hacer por ti?
Noelia: Si no recuerdo mal, tú eres un manitasmanitas (m. pl.)manitas, ¿verdad?
Adrián: Si te refieres a una persona que puede reparar cualquier cosa por sí mismo, exacto, ese soy yo. Un manitas. Pero no me dedico a reparar cosas profesionalmente. Lo hago porque me gusta y para ayudar a mis amigos. Cuéntame, ¿cuál es tu problema?
Noelia: ¿Mi problema? Creo que tienes que hablar en plural. ¿Cuáles son mis problemas? Porque no funciona nada en mi casa.
Adrián: Bueno, tranquila. Voy a ayudarte. ¿Por dónde empezamos?
Noelia: La lavadora se estropeóestropearsese estropeó hace dos semanas. La puerta no se cierra bien y el agua se sale.
Adrián: Pues creo que voy a tener que cambiar toda la puerta. Escríbeme un mensaje con el modelo de la lavadora y envíame una foto.
Noelia: Sí, claro. También tengo un problema con la nevera. No se enciende la luz.
Adrián: ¿Desde cuándo pasa esto?
Noelia: También desde hace dos semanas, más o menos.
Adrián: Puede ser un problema muy sencillo de solucionar. ¿Has probado a cambiar la bombillabombilla (f.)bombilla?
Noelia: No, la verdad es que no sé cómo hacerlo.
Adrián: No hay problema, yo lo puedo hacer en menos de cinco minutos. Además, tengo una buena colección de bombillasbombilla (f.)bombillas para neveras en mi caja de herramientasherramienta (f.)herramientas. Seguro que alguna funciona en tu nevera.
Noelia: ¡Oh! Muchísimas gracias, Adrián.
Adrián: ¿Eso es todo? ¿La puerta de la lavadora y la luz de la nevera?
Noelia: No, también tengo problemas con el horno. Cuando lo enciendo se apaga la luz de toda la casa. No puedo hacer pizzas.
Adrián: Ese sí que es un problema gravegravegrave.
Noelia: ¿El del horno?
Adrián: No, lo de que no puedes hacer pizzas. Eso sí que es un drama. Tenemos que solucionarlo cuanto antes.
Noelia: Qué gracioso. ¿Crees que vas a poder arreglar el horno también?
Adrián: Sí, claro. Los hornos son mi especialidad. Además, ese problema es bastante comúncomúncomún. Solo tengo que comprobar la conexión. Puedo ir esta tarde a tu casa y arreglarlo todo.
Noelia: Muchísimas gracias, Adrián. Yo te invito a cenar. Puedo pedir unas pizzas, sé que te encantan.
Adrián: Puedes preparar la masa y los ingredientes en casa. Estoy seguro de que vamos a poder utilizar el horno esta noche.
Noelia: Ohh. ¡Qué bien! Eres un auténtico manitas. ¿Por qué no te dedicas a esto profesionalmente?
Adrián: Porque cuando es por trabajo no se disfruta igual. Si es para ayudar a mis amigos me gusta mucho más.